Antes de empezar quisiera decir, Este es uno de los pocos juegos que demuestran que los videojuegos son el octavo arte.
El titulo se desarrolla en los restos de CloudBank, Una desolada pero bella ciudad con matices de ciberpunk.
Una utopía futurista donde todo, desde el clima hasta el color del cielo, está controlado por la población. En este escenario conoces a Red, una hermosa cantante a quien le robaron, la voz. Red se encuentra a los pies de un hombre aparentemente asesinado por una espada llamada Transistor, que puede trasmitir su voz y que además de ser el eje central en la historia sirve como narrador excepcional. Si fuiste fanático del narrador de Bastion, te alegrará saber que Logan Cunningham regresa para prestar su voz en esta nueva entrega.
Desde un principio, el juego se aleja del estándar de contar la historia con cinematics o largos segmentos de diálogo, sólo hay fragmentos con pocas explicaciones de lo que está sucediendo. Preguntas como ¿de qué manera decayó la ciudad? O ¿por qué Red no tiene voz? no son respondidas de inmediato ni claramente, sino que a lo largo de la travesía existe un velo de misterio que sólo te deja ver lo suficiente para generar más dudas, aunque siempre capturando tu atención para saber lo que viene a continuación.
El sistema de combate está hecho para jugarlo a tu gusto con 2 opciones, ya sea que prefieras pelear en tiempo real (como un beat’em up convencional) o convertir los combates en acción por turnos. Si prefieres esta última opción, entrarás en el modo Turn, donde congelarás el tiempo y eso te dará oportunidad de usar tus habilidades de la manera más conveniente. En lugar de un contador de tiempo para los turnos habrá una barra de energía que contará tus movimientos; por ejemplo, podrás atacar, esconderte, moverte o volver a atacar y cada una de tus elecciones será contabilizada como una acción, lo cual es parte de la estrategia. Deberás tomar en cuenta que el uso de las habilidades más poderosas requiere tener la mayor parte de tu barra de energía, así que piensa antes lanzarte solo con tu ataque más poderoso, porque te quedarás sin energía frente a varios enemigos, y será muy complicado, sobre todo cuando pierdas de vista a alguno de ellos. El juego no tiene un sistema de cámara libre durante los combates, la cámara está fija sobre Red, así que muchas veces tus adversarios saldrán de tu rango de visión. Aunque te acostumbras, llega a ser molesto cuando enfrentas varios adversarios y no puedes planear tu estrategia porque no sabes contra cuántos pelearás debido a que la cámara no te permite verlos a todos desde el inicio. Al presionar gatillo derecho del control activarás el Turn; en ese instante el diseño será similar a una cuadrícula, muy útil para manejar los espacios donde se encuentran tus adversarios, así como el rango de tus ataques. Después de elegir tus habilidades y los objetivos, deberás presionar el gatillo derecho nuevamente para regresar a un estado de tiempo real mientras el resto se mueve lentamente. Si te decides por otra estrategia en el último momento, tienes la opción de presionar el gatillo izquierdo y cambiar tus movimientos tantas veces como quieras, incluso al inicio del turno, pero una vez que presiones el derecho, todo ocurrirá como una coreografía perfecta con explosiones de colores y partículas que lucen espectaculares. Esto es parte del encanto de Transistor, los combates nunca se sienten repetitivos; cada interacción con los enemigos puede ser única, ya sea combatiendo rápidamente o enfocándote en el uso de Turn. Lo mejor es combinar ambos estilos, algo esencial al avanzar en el juego porque los bloques de enemigos serán más variados.
PD: Te enamoraras de red *u*